Hasta el 31 de enero se puede visitar en la Torre Agbar de Barcelona una exposición sobre el uso del agua: “Los caminos del agua”. Es una buena excusa para visitar la torre. La exposición es pequeña pero está bien montada, tan sólo se visita el vestíbulo, pero es suficiente para darse cuenta de como es la torre por dentro.
Un pequeño detalle: cómo es posible que hayan ciudades que tengan un gasto de agua cercano a 500 litros/persona/día el caso de Moscú, Nueva York más de 500 ó Pekín con 666… Y en Barcelona gastamos 116 litros/persona/día, y aun hemos de ahorrar agua…!
La estructura de la Torre es muy sencilla. Está formada por dos cilindros, uno grande y otro pequeño en su interior, no son exactamente circulares, tienen forma de óvalo. Entre los dos cilindros no existe ninguna columna, o sea que los espacios interiores son totalmente diáfanos, permitiendo mucha movilidad.
El cilindro pequeño contiene en su interior los ascensores, escaleras, aseos y zonas de servicios. Entre el pequeño y el grande se extiende la zona de trabajo. Y el cilindro grande forma la fachada exterior, que se acaba con una piel a base de láminas de cristal, dando ese efecto de objeto líquido.
Lo más espectacular de la torre es su iluminación nocturna. No se proyectan cañones de luz sobre él, sino que ya contiene en el interior de su piel de cristal todas las luces de colores.
Para más información http://www.torreagbar.com/
Horario de la exposición: de lunes a sábado, de 10:00 bat 19:00. Domingos, de 10:00 bat 14:30